La falta de energia despues de los 40: cuando tu sofá se convierte en tu mejor amigo
- Hillary Huyghue-Matias
- 17 nov 2024
- 6 Min. de lectura
Actualizado: hace 3 días
Foto de Foto de: Kaboompics.com :
Hace poco me pasó algo que solo podría describirse como una pequeña crisis, y fue provocada por el simple acto de levantarme del sofá. Estaba sentada allí cuando sonó mi alarma diaria, recordándome que era hora de salir a caminar. Empecé a considerar si debía ir o seguir viendo los mismos episodios de mi serie favorita Friends por la décima vez. Sentí como si el sofá me hubiera tragado en un abrazo gigante, y la sola idea de moverme de esa posición, y más aún de ponerme ropa de gimnasio y encontrar mis tenis, parecía tan abrumadora que me dejó sintiéndome aún más agotada. Empecé a convencerme a mí misma razones para no ir a caminar: "¡Espera un minuto! Fui a la cocina hace cinco minutos y mi reloj incluso lo registró, así que eso debe contar como algún tipo de ejercicio, ¿no?". Después de una hora de debate (y comiendo papitas al mismo tiempo), me di cuenta de que esta es mi nueva realidad: la falta de energia despues de los 40: la energía se ha acabado, las ganas de hacer cualquier cosa se han acabado y lo único que no me parece una tarea abrumadora es mirar cortos videos de YouTube de animales haciendo cosas chistosas. Si te sientes identificado con esto, no te preocupes, no estás solo.
La Falta de Energia ...¿que esta pasando aqui?
Si tienes más de 40 años y sientes que has sufrido una baja de energía a toda velocidad, no es solo un producto de tu imaginación. Hay algo en esta edad crucial en la que te despiertas y te das cuenta de que no eres exactamente tan "joven y vital" como antes. La emoción de anticipar un fin de semana lleno de actividades puede ser ahora un recuerdo del pasado. De hecho, cuando recibes una invitación para un evento futuro, es posible que a menudo te preguntes si tendrás la fuerza física y mental necesaria para asistir. Si esto te suena familiar, no significa que de repente ya no eres una persona social (a menos que nunca lo hayas sido, por supuesto). Parte de este cambio se puede atribuir a los cambios hormonales, y parte es solo un pequeño recuerdo de que has ganado unos años más de experiencia (y tal vez uno o dos kilos de más). Tu cuerpo comienza a andar a un paso más lento, tu sueño ya no es tan regular e incluso la idea de salir fuera de casa puede parecer tan cansón como escalar el Monte Fuji.
Sin embargo, ¡no pierdas la esperanza! Aunque no te conviertas en un corredor de maratón o en un asistente diario a clases de gimnasio HIIT (alta intensidad) de la noche a la mañana (a menos que ya lo seas, en cuyo caso, comparte tu secreto por favor), existen algunas estrategias para recobrar la energía que no dependen de una solución rápida ni de la idea de "simplemente seguir adelante". Aquí tienes cuatro sugerencias para combatir la falta de energía:
Comienza a hacer sesiones pequeñas de ejercicio
¿Solías seguir una rutina estricta de levantarte a las 5 de la mañana, ir al gimnasio a hacer ejercicio durante dos horas, ir a trabajar, hacer las tareas del hogar, pasar tiempo con la familia y aún así lograr dormir ocho horas? El hecho de que ya no puedas seguir con esa rutina no significa que sea hora de tirar la toalla. En lugar de mirar tus tenis como si fueran el enemigo, intenta hacer sesiones pequeñas de ejercicio. Esto implica hacer cortas sesiones de ejercicio a lo largo del día, como estiramientos de 10 minutos, sentadillas mientras te cepillas los dientes o, si te sientes atrevido, una fiesta de baile improvisada mientras cargas el lavaplatos. Estas sesiones cortas pueden ayudarte a sentirte con más energía sin comprometerte a una hora de correr en la caminadora. ¡Recuerda, hacer algo siempre es mejor que no hacer nada! Pronto te encontrarás moviéndote más y no te sentirás tan cansada.
Las siestas energéticas son tus amigas
Hubo un tiempo en el que eras una persona enérgica que se levantaba al amanecer, se quedaba trabajando hasta altas horas de la noche, hacía planes y conquistaba el mundo. Pero, ¿ahora? Lo único que te alegraría el día, además de un café con leche de avena y caramelo de Starbucks, sería una siesta de 20 minutos. ¡No te sientas culpable por ello! Los bajones de energía después de los 40 son una realidad, así que si tu cuerpo te está indicando que te tomes una siesta, simplemente acéptala. Se ha demostrado que las siestas aumentan tus niveles de energía y tu productividad. Volverás al mundo de los vivos sintiéndote como si fueras una nueva persona, o al menos un poco más como una persona que ha dormido lo suficiente como para funcionar sin diez tazas de café. Tu yo del futuro te lo agradecerá.
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Eres lo que comes
Aunque es una frase vieja, en realidad somos lo que comemos. No se puede negar que la dieta juega un papel crucial en los niveles de energía. Aunque no quieras escucharlo, es posible que el hecho de consumir alimentos ricos en carbohidratos y beber Coca-Cola no te proporcione el rápido aumento de azúcar que solías tener de joven. Además, todos sabemos que el estilo de vida que llevábamos en nuestra juventud termina cobrándonos en el futuro. En lugar de eso, alimenta tu cuerpo con alimentos saludables ricos en vitaminas. Incorporar frutas frescas, verduras, proteínas sin grasa y muchas verduras de hoja verde (no hagas muecas) puede ayudarte a mantener la energía durante todo el día.
Mantenerse bien hidratado, es decir, beber mucha agua, puede mantener estable su nivel de energía y evitar el bajón de la tarde. Lo crea o no, los estudios demuestran que incluso una deshidratación leve puede reducir los niveles de energía hasta en un 20%. Intente beber al menos 8 tazas de agua al día y, si desea un poco de sabor, intente agregarle limón. Tal vez considere reemplazar un par de tazas de café por otra bebida, como un té herbal. Como soy un gran creyente en mi taza de café matutino, nunca le recomendaría a nadie que dejara de tomar café de golpe.
Permítete hacer menos
A veces, el problema no es que no tengas energía, sino que intentas hacer demasiado. El mundo nos ha hecho creer que ser "productivo" significa hacer varias cosas a la vez sin parar. Pero no tienes por qué ser una mujer que hace todo: el trabajo, los niños, la vida social y todas las demás responsabilidades. Simplifica tu agenda y da prioridad a las tareas que realmente importan. ¿Y el resto? Déjalo pasar. No sientas que tienes que asistir a todos los eventos, responder a todos los correos electrónicos o cocinar una comida gourmet. Si es demasiado, no te castigues. ¿Y si eliges no hacer nada? Eso también está bien. Si quieres relajarte, siéntete libre de reclamar un tiempo en el sofá sin sentirte culpable por ello. Elige tu programa favorito, ponte una cobija acogedora y saborea el momento. Solo recuerda que el tiempo en el sofá debe ser un momento de refrescarte en vez de un lugar de descanso permanente.
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Recargando la batería de energía
Al final, la falta de energía y ganas de hacer algo en las mujeres de mas de 40 años no es un defecto personal. La realidad es que, a medida que envejecemos, podemos empezar a sentir que nuestros cuerpos nos están jugando una broma cruel, transformándose de centros de energía vibrantes a una orchesta de instrumentos desafinados. El cuerpo cambia, la mente divaga y, de repente, sentarse en el sofá se siente como una buena elección de vida. Pero con estos pequeños ajustes (hacer sesiones pequeñas de ejercicios, tomar siestas cuando el cuerpo lo pide, comer mejor y darse un respiro de vez en cuando) puedes manejar los bajones de energía como una profesional. ¿Y quién sabe? Tal vez esa caminata suceda mañana. O tal vez sea otro episodio de Friends ... ZonaSinJuicios.
Como siempre, ¡me encantaría saber de ti! ¿Tienes alguna sugerencia para combatir la falta de energia?
¡Hasta el próximo post y a descansar, recuperarse y recargar energías!
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